El grupo Abney Park crea música inspirada en el Steampunk, un movimiento artístico que evoca un tiempo que nunca fue: alta tecnología impelida por máquinas de vapor en la Inglaterra Victoriana o Industrial. Autómatas de cuerda, batallas en dirigibles, el Nautilus de Julio Verne, etc.
Extrañamente odiado por muchos, el steampunk puede ser visto como una respuesta al diseño moderno: limpio y ordenado, por uno ornamental y que decisivamente representa la ética del creador individual. Recordemos que ese Ipod rojo vino no es único, sino parte de los miles en manos de personas que creen poseer algo que casi nadie tiene. Ahora bien, si usted mismo reemplaza la cubierta plástica por una de bronce forjada en su sótano, cambia los botones por resistores neumáticos, le inserta un tubo nixie (porque le parece bonito) y le da una garnatada a Steve Jobs con un guante de cuero después de tomarse unos tragos de absinthe ... es usted un steam-punk (con problemas, posiblemente un antisocial).
Ahora bien, antes de cometer este insensible y ostentoso acto de caballerosa violencia, considere que la Apple I fue creada en un garaje y como no tenía caja la montaron en una especie de cajón de madera. Woodpunks.
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