A veces la comunidad científica me da ganas de llorar; esta semana he leído sobre dos revolucionarias ideas para evitar el calentamiento global, la primera proviene del campo de la bioingeniería: manipular genéticamente algunos tipos de árboles para potenciar su capacidad inherente de transformar CO2 en O2 (dióxido de carbono en oxígeno) . La segunda consiste en promover el cultivo de plantas cuyas hojas sean más reflexivas, propiedad que les permite retornar más energía solar al espacio en vez de calentar el planeta.

La Vida tiene su propia "inteligencia", una manera tried and true que le permite persistir y evolucionar, en su diseño se aprecian tanto la complejidad de sus elementos constituyentes como sus relaciones, una red de fuerzas que el Hombre en su impaciencia y ambición se empeña en ignorar.
Lo que obtenemos fácilmente, estimamos muy poco; es la entrañabilidad lo único que da valor a las cosas. - Thomas Paine
No hay comentarios.:
Publicar un comentario