Me ha gustado mucho porque, con el advenimiento de los contenidos de alta definición siento que se ha descuidado el aspecto auditivo de la percepción; no me refiero pues a la música que acompaña a las imágenes -que suele ser apropiada-, sino a que yo preferiría poder escuchar los sonidos naturales, ambientales de los lugares , de tal manera que la experiencia se aproxime lo máximo a la realidad: pasear por la Antártida o un castillo japonés, un barrio de Londres o la orilla del Amazonas.
Allí encontré una grabación realizada en las calles de Bangalore, India. Si uno cierra los ojos, puede imaginarse en el lugar, la gente, el tráfico, todo. Solo me hizo falta un plato de pollo tandoori.
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