2/26/2009

En posesion de la verdad

Empecé a leer un poco sobre El Secreto (un libro que propone que el pensamiento positivo atrae la buena fortuna y el dinero) y me detuve para no volver.

Con tanta base en la realidad como la creencia en hadas, la idea de que los personajes más relevantes de la historia guardasen para sí algún poder o conciencia especial que les permitió surgir de entre los demás hombres y mujeres comunes de su tiempo es ridícula; aún más, un insulto al espíritu humano y demuestra un desconocimiento deliberado de la forma en que estas personas triunfaron (relativo), sus características únicas y circunstancias.

Se necesita bajar del pedestal a las figuras para entender a fondo sus naturalezas, si analizamos un notable como Leonardo da Vinci, comprendemos que su genio y obra es el resultado de muchos elementos, internos y externos, condiciones, esfuerzos y fallas; iguales que las de cualquier otro ser humano.

Simplemente se me hace imposible imaginármelo en una silla suspirando por el conocimiento, en vez de visualizarle escarbando todo rastro de sapiencia que pudo extraer de su estudio del mundo, experimentando y fallando miles de veces hasta obtener un resultado que pudiera o no satisfacerle y luego, privándonos de ver muchas de sus obras a término, moverse a la siguiente cosa que su curiosidad le atrajese.

¿Quién sabe cuanta soledad y dolor le causó a Leonardo estar poseído por una determinación absoluta por conocer a la Verdad? Pero adentrarse en esa ideas no vende libros a quienes desean riquezas fáciles. La Verdad es inasible y ese es el secreto de su atracción. Para una aproximación más real a la mente de un genio, recomiendo el ensayo "Introducción al método de Leonardo da Vinci" de Paul Válerie.

"Una cosa es mostrarle al hombre que esta equivocado y otra es ponerlo en posesión de la verdad" - John Locke